martes, 1 de mayo de 2012


No quiero ni soy la más perfecta, ni la más guapa ni la más graciosa. Tampoco quiero tener el pelo más largo y bonito ni la sonrisa más espectacular. No quiero ser millonaria ni poder comprarme toda la ropa del mundo cuando y donde quiera. No quiero nada de eso y mucho menos ser la mejor. Tan sólo quiero equivocarme millones de veces y caer para que luego vengas tú y me levantes. Me gusta que me quieras con mis infinitos defectos, mis chorradas y mis estúpidas y constantes rayadas. Pero sinceramente, lo que más me gusta es que me digas que me quieres, con eso me sobra para ser feliz, bueno, y con tu sonrisa.

Que soy toda suya cuando nos encontramos a dos centímetros, frente a frente, que no podría hacerme sentir mejor, que ha quedado demostrado que una vez más valió la pena perder para ganar.