martes, 13 de marzo de 2012

es hora de aprender de los errores.

Gracias a todos aquellas personas que alguna vez me dijeron que yo era lo más importante para ellas y acabaron por echarme de sus vidas. Gracias a esas personas que alguna vez me prometieron un para siempre y ahora sus promesas están desechas. Gracias aquellas personas que decían entenderme y ahora me critican. Gracias también a quién me dijo que sin mí ellos no eran nada y ahora pasan de mí. Gracias a todas aquellas que me han abandonado justo en el momento que más les necesitaba, cuando he conseguido a la persona que más quería después de diez meses, pero que a pesar de todo, yo aún estoy para ellos. A todas estas personas, gracias, de verdad, me habéis hecho darme cuenta de quiénes estarán ahí siempre, en las buenas y en las malas y quiénes tan sólo fingen ser mis amigos por puro interés.
A partir de ahora me centraré en esas personas que de verdad merecen la pena.

Quiero que siga así, tu alma pegada a mí mientras nos quedamos quietos dejando que la piel cumpla poco a poco todos sus deseos.
Hoy no hay nada que hacer, quedémonos aquí, contándonos secretos, diciéndonos bajito que lo nuestro siempre se hará eterno.